Dirigida en 1997, Genio indomable se ha asegurado un lugar entre los clásicos del cine por la calidad de su guión y la actuación emblemática de todos los personajes.

+ Ver 15 grandes lecciones de vida que puedes aprender del cine

Para refrescar la memoria: la historia cuenta el drama de Will, un chico muy inteligente que, a pesar de su increíble talento para las matemáticas, trabaja como limpiador en una universidad.

Así que Sean, interpretado por Robin Williams, se dedica a ayudar a Will, vivido por Matt Damon, a construir su identidad y comprender su papel en el mundo.

La película está llena de enseñanzas y pensamientos notables que han hecho historia y siguen influyendo en guionistas de todo el mundo. La trama, aunque sencilla, es cautivadora y capaz de hacer que mucha gente se identifique con los personajes.

Para celebrar el 20 aniversario del estreno, hemos separado las principales lecciones que puedes aprender de la película:

Recibir ayuda no es una vergüenza...

No eres débil ni incapaz por haber aceptado la ayuda de alguien. De hecho, débil es el que rechaza la ayuda y prefiere seguir hundiéndose solo. Es muy noble comprender y ver que necesitas coger de la mano a alguien para salir del fango y ésta es una de las principales lecciones de la película.

... Y es valiente bajar la guardia

Muchas veces nos ponemos en guardia por traumas del pasado, por experiencias muy negativas en cualquier tipo de relación. Por miedo a que nos vuelvan a hacer daño, preferimos no sentir nada por alguien y somos incapaces de abrirnos y entablar nuevas amistades.

Confiar en alguien parece imposible después de una experiencia traumática, pero Genio Indomable nos demuestra que abrirse es extremadamente valiente y puede cambiarte la vida.

Elige bien a las personas que te rodean

Mantener cerca a personas tóxicas es extremadamente perjudicial para tu vida. Cuando no elegimos bien quién se queda a nuestro lado, y acabamos juntándonos con personas negativas, envidiosas, mentirosas y mezquinas, la dificultad para convertirnos en personas de éxito es mucho mayor.

Así que ten a tu alrededor sólo a gente que crea en ti y que te ponga las pilas de verdad. Deja la negatividad fuera.

Todos necesitamos verdaderos amigos que impulsen nuestros sueños y nos ayuden en el camino.

La educación puede venir de cualquier parte

Esta película nos enseña que se puede aprender mucho en una biblioteca pública y de la dedicación solitaria.

A veces puedes aprender más que alguien que se ha gastado cuatro años y miles de dólares en una universidad privada o años de su vida para entrar en una universidad pública.

Por supuesto, las posibilidades de aprender más en una buena universidad son mayores, pero sin dedicación, un título no es garantía de inteligencia y éxito.

Por otro lado, un aula puede enseñarte cientos de cosas que la vida no te enseña. Así que ten ganas de aprender. Todo el tiempo. No te cierres en banda, no creas que ya sabes lo suficiente y no caigas en la trampa de la arrogancia y dejes de estudiar.

Debemos dejar de preocuparnos por lo que digan los demás

Para conquistar nuestro espacio en el mundo, debemos dejar de preocuparnos tanto por lo que los demás piensen de nosotros. Cuando actuamos así, podemos perdernos en el camino y olvidar quiénes somos realmente. Es fácil cambiar de personalidad en el camino hacia una meta y, por el camino, olvidar lo que realmente queremos y cuál es nuestro objetivo principal.

Así que preocúpate menos de cómo te perciben los demás y sé fiel a tu carácter.

Por último, recuerda: todos estamos intentando encontrar nuestro propósito en la vida. Algunas personas tardan más que otras, así que no te frustres si a los 25 años aún no eres quien soñabas ser, pero lucha cada día de tu vida para conseguirlo.